El servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Universitario de Torrejón ha alertado sobre los efectos negativos de las altas temperaturas en las personas con varices durante el verano. Estos pacientes pueden experimentar síntomas como pesadez, calambres, cansancio, dolor, picor, ardor o quemazón. Es crucial seguir una rutina de cuidados para prevenir complicaciones y mantener una buena salud vascular.
Las varices son venas elongadas, dilatadas, tortuosas o ramificadas que dificultan el retorno eficaz de la sangre al corazón, especialmente en los miembros inferiores. El calor provoca la dilatación de las venas, empeorando la presión en las venas afectadas. Factores como la bipedestación prolongada, el género femenino, el embarazo, la obesidad y otros pueden contribuir al desarrollo de varices.
Para evitar los efectos negativos del calor en las varices, se recomienda usar ropa cómoda y fresca, evitar prendas apretadas, realizar baños de agua fría en las piernas y aplicar crema hidratante refrigerada en la zona afectada. Es importante acudir a un especialista ante la presencia de síntomas o signos de enfermedad venosa.
El diagnóstico de las varices se realiza mediante ecografía Doppler, permitiendo evaluar la presencia de reflujo en las venas exploradas. En el Hospital Universitario de Torrejón, se realiza el endoláser venoso, una intervención mínimamente invasiva ambulatoria que no requiere ingreso y permite una pronta recuperación. Tras la intervención, se recomienda el uso de medias de compresión por algunas semanas.