Abel G.M.
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Una guerra medieval que sirvió de inspiración para la serie Juego de Tronos.
La famosa saga de George R.R. Martin Canción de hielo y fuego (más conocida por su título televisivo, Juego de Tronos) está inspirada en uno de los conflictos militares más importantes que tuvieron lugar en la Inglaterra medieval: la Guerra de las Dos Rosas.
Esta guerra por el trono de Inglaterra duró desde 1455 hasta 1487 y enfrentó a dos grandes casas de la dinastía Plantagenet: los York y los Lancaster. Los emblemas de ambas casas lucían una rosa en su blasón, de ahí el nombre de Guerra de las Dos Rosas.
La guerra empezó después de que el rey Enrique VI sufriera un brote de esquizofrenia que le dejó incapacitado para gobernar. Este monarca pertenecía a la casa de Lancaster, por lo que la sucesión habría debido recaer en su linaje; sin embargo, el consejo de regencia apoyó las pretensiones al trono del duque de York.
El desenlace fue que ninguna de las dos casas logró el trono, ya que durante la guerra murieron los pretendientes masculinos de ambos bandos. En su lugar, una nueva casa ocupó el poder: los Tudor, que descendían tanto de los Lancaster como de los York.
