En 1969, los Beatles, la banda británica más famosa de la historia, anunciaron su separación después de una década de éxitos. ¿Pero cuáles fueron las razones detrás de esta decisión?
Se ha especulado que Yoko Ono fue la “culpable” de la separación, ya que su presencia en los ensayos y grabaciones molestaba al resto de los miembros del grupo y rompía un acuerdo previo de mantener a las parejas alejadas del trabajo de la banda.
Además, la muerte de su representante Brian Epstein en 1967 fue un factor determinante. Epstein solía mediar en los conflictos entre los miembros, pero tras su fallecimiento, Paul McCartney asumió sus responsabilidades y empezó a sentir la carga de gestionar el grupo en lugar de centrarse solo en la música.
Con el tiempo, las tensiones y desavenencias aumentaron en el grupo, llevándolos a distanciarse hasta su disolución. A pesar de esto, los Beatles continuaron brillando individualmente, aunque ya no como un grupo unido.