Cuando Cosimo de Médici I consolidó su poder en la Florencia del siglo XVI con la ayuda de Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico, surgieron grandes intercambios que dejaron huella en la arquitectura, la pintura y otras manifestaciones del arte renacentista en Europa. Uno de los regalos más valiosos que se hizo a la corte española fue la escultura de Miguel Ángel, ‘San Juan Bautista niño’, que llegó a España en 1537 y se trasladó a Úbeda, en Jaén.
Después de casi cuatro siglos en la Sacra Capilla del Salvador en Úbeda, la escultura ya no se encuentra allí desde 1936. Sin embargo, gracias a un acuerdo entre la Casa Ducal Medinaceli y el Ayuntamiento de Úbeda, el ‘San Juanito’ podría regresar a su hogar de forma definitiva. ¿Cuál es la historia detrás de esta obra?
El ‘San Juanito’ en el pasado: de Florencia a Jaén
La escultura fue regalada por Cosimo de Médici I a Francisco de los Cobos, secretario de Carlos I, como muestra de agradecimiento. A pesar de no pertenecer a la realeza, De los Cobos recibió el obsequio y además la oportunidad de casarse con una mujer de la nobleza, María de Mendoza. Este matrimonio dio lugar a un hijo, Diego de los Cobos, quien heredaría el título de Marqués de Camarasa de la Casa Ducal de Medinaceli.
La Casa Ducal de Medinaceli ha conservado la escultura desde 1568, cuando fue depositada en la Sacra Capilla del Salvador por la esposa de De los Cobos. Esta capilla sirve como panteón de este influyente personaje cuya vida estuvo marcada por la búsqueda de prestigio social.
Un regalo hecho añicos: destrucción, reconstrucción y retorno del ‘San Juanito’
La escultura pasó desapercibida durante siglos hasta que en 1930 se confirmó que era obra de Miguel Ángel. Tras su destrucción en 1936 durante la Guerra Civil, la Fundación Casa Ducal de Medinaceli logró reconstruir la obra en 1994. En 2013 se confirmó oficialmente la autoría de Miguel Ángel, revelando que la escultura fue creada durante su juventud en el quattrocento.
Desde entonces, la escultura ha recorrido diversas galerías florentinas y en 2015 fue expuesta en el Museo del Prado. Ahora, con su historia resuelta, el ‘San Juanito’ podría volver a Úbeda, cerrando así un capítulo tumultuoso y reforzando los lazos diplomáticos y culturales entre Italia y España.