En la escuela de gladiadores de Léntulo Batiato en Capua, un esclavo tracio llamado Espartaco se preparaba para luchar en la arena con otros compañeros celtas y germanos desafortunados.
En el año 73 a.C., de los 200 gladiadores que se rebelaron contra Roma, solo 70 lograron escapar. Decidieron arriesgar su libertad en lugar de ser exhibidos ante los espectadores, según el historiador Apiano.
Bajo el liderazgo de Espartaco, marcharon al sur, liberando esclavos y desafiando a las legiones romanas lideradas por Craso y Pompeyo. Tras ser traicionados, Espartaco y sus seguidores fueron derrotados y más de 6.000 sobrevivientes fueron crucificados en la Vía Apia.
Un equipo de la Universidad de Kentucky descubrió un muro de piedra y terraplén de 2,7 kilómetros en Calabria, construido por Craso para contener a Espartaco durante la revuelta.


La muerte de Espartaco, litografía realizada por el ilustrador alemán Hermann Vogel en 1882.
La muerte de Espartaco, litografía realizada por el ilustrador alemán Hermann Vogel en 1882.
PD
Se encontraron restos de una fosa romana y armas en el lugar, indicando una batalla campal. La muralla se identificó como parte de las estructuras de Craso para contener a Espartaco, confirmado por el Instituto Arqueológico de América.
El descubrimiento se logró gracias a tecnologías como georradar, LiDAR y magnetometría, demostrando el potencial de la arqueología moderna.