En el Arrecife Alacranes yacen numerosos navíos naufragados, un lugar poco conocido para la mayoría. El Parque Nacional Arrecife Alacranes se encuentra a 140 kilómetros de la costa yucateca, al norte del Puerto de Progreso, en el golfo de México. Es el único arrecife conocido en esa zona y fue declarado parque nacional en 1994.
El arrecife tiene una forma semicircular y una extensión de aproximadamente 300 kilómetros cuadrados. A pesar de albergar una gran diversidad de especies, es poco visitado por turistas. Con una historia que data desde los siglos XVI al XIX, el arrecife era conocido por su peligrosidad y su importancia para la navegación de cabotaje.

Imagen del Arrecife Alacranes y localización del pecio Ancla Macuca. Los puntos en color rojo corresponden a la ubicación de yacimientos ya registrados por el INAH.
Imagen del Arrecife Alacranes y localización del pecio Ancla Macuca. Los puntos en color rojo corresponden a la ubicación de yacimientos ya registrados por el INAH.
SAS-INAH
El origen de su nombre
El nombre del arrecife proviene de un antiguo relato de Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés en su obra Historia General y Natural de las Indias. Según este relato, el nombre «Alacranes» se debe a la peligrosidad del lugar, comparada con el veneno de un alacrán. Esta historia se remonta a la época colonial.
El nombre del arrecife se origina en un relato antiguo de Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés.

Galeón pintado por el artista español Antonio de Brugada en 1858. Museo Naval de Madrid.
Galeón pintado por el artista español Antonio de Brugada en 1858. Museo Naval de Madrid.
CC BY-SA 4.0
En 1524, Alonso Suazo, exgobernador de Cuba, naufragó en el arrecife durante un conflicto entre Hernán Cortés y Francisco de Garay. A lo largo de los años se han documentado numerosos naufragios en la zona, incluyendo el reciente descubrimiento del pecio Ancla Macuca, un barco español del siglo XVIII que formaba parte de la flota de Galeones de Tierra Firme.
El Arrecife Alacranes alberga una gran cantidad de pecios que evidencian su peligrosidad. Apenas se ha explorado el cinco por ciento de su superficie, dejando la posibilidad de descubrir más naufragios en el fondo marino. Destaca el hallazgo del Ancla Macuca, cuyos clavos indican su época de construcción a finales de 1780.
Varios naufragios en la zona muestran la peligrosidad del Arrecife Alacranes.

Naufragio de un galeón frente a una costa rocosa. Pintura al óleo del artista holandés Jan Porcellis en 1618. Museo Hallwyl, Estocolmo.
Naufragio de un galeón frente a una costa rocosa. Pintura al óleo del artista holandés Jan Porcellis en 1618. Museo Hallwyl, Estocolmo.
PD
El pecio Ancla Macuca, descubierto recientemente, es un tesoro submarino que ahora se exhibe en el Museo de Arqueología Subacuática El Fuerte de San José El Alto, en Campeche. Conformado por 420 piezas de oro, esmeraldas, diamantes y más, este tesoro revela la vida cotidiana y el comercio naval del siglo XVIII. El hallazgo del Ancla Macuca es solo uno de los numerosos pecios identificados en el Arrecife Alacranes.
Fuente (para controlar el refrito): https://historia.nationalgeographic.com.es/a/arrecife-alacranes-trampa-para-navegacion-epoca-colonial_20930