La ministra de Sanidad, Mónica García, expresó su molestia al enterarse de la privatización del antiguo hospital militar en Chamberí, Madrid. Durante el Pleno del Senado, el senador del PP Enrique Ruiz Escudero cuestionó esta decisión, criticando la Ley de Gestión Pública del Sistema Nacional de Salud. García respondió que el edificio había sido ofrecido previamente a instituciones públicas como el Ayuntamiento de Madrid y al propio Ruiz Escudero, quien lo rechazó, permitiendo que el Grupo Quirón lo adquiriera.
La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fatima Matute, desmintió las declaraciones de la ministra, afirmando que el Hospital de Chamberí nunca fue ofrecido a la Comunidad ni al Ayuntamiento de Madrid, y que fue el Ministerio de Defensa quien lo vendió a Grupo Quirón. En mayo, el Gobierno entregó este hospital al Grupo Quirón por 180 millones de euros para su explotación durante 75 años. García defendió que el Gobierno no tiene hospitales ni competencias desde 2003, y que la privatización de un edificio abandonado no equivale a privatizar la sanidad.
