El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, se enfrenta a críticas internas y tensiones con los fiscales, especialmente en el Consejo Fiscal, a lo largo de sus más de tres años en el cargo. Su gestión ha sido cuestionada y ha perdido prestigio profesional, con más de quince escándalos que comprometen la credibilidad de la institución y ponen en duda su continuidad.
Entre los escándalos se encuentran las maniobras contra el fiscal del caso Villarejo, Ignacio Stampa, el cambio de criterio en la investigación del secuestro y asesinato del concejal Miguel Ángel Blanco, el ascenso anulado de Dolores Delgado, la negativa a informar sobre la amnistía, y las acusaciones de lawfare en el contexto de la investidura de Pedro Sánchez, entre otros.
Además, se suma el segundo nombramiento de Dolores Delgado como fiscal de Memoria Democrática, que está siendo revisado, y la querella presentada por el Partido Popular contra García Ortiz por presunta prevaricación. La APIF ha recurrido la reelección del fiscal general por su perfil «progubernamental».
Las órdenes de García Ortiz sobre la reforma penal de la Ley del ‘sólo sí es sí’ causaron malestar en la Fiscalía, al igual que el cambio de criterio en el terrorismo de la causa de Tsunami Democràtic contra Carles Puigdemont. El fiscal general ha sido objeto de críticas por ordenar a la Fiscalía Provincial de Madrid emitir un comunicado con datos confidenciales de un particular.
La Asociación de Fiscales ha pedido la dimisión de García Ortiz y velará por la independencia necesaria para armonizar la institución con los estándares de la Unión Europea. En el marco de la reforma del Estatuto Orgánico del Ministerio, la asociación estará atenta para garantizar la transparencia y la independencia del Ministerio Público.
Fuente (para controlar el refrito): https://www.eldebate.com/espana/20240414/quincena-escandalos-salpican-gestion-fiscal-general-dentro-fuera-tribunales_188954.html