La Comisión de Justicia y Paz de la Asamblea de Ordinarios Católicos de Tierra Santa (obispos católicos de los distintos ritos en Israel, Palestina, Jordania y Chipre) ha solicitado que se evite justificar la violencia en la Franja de Gaza bajo el concepto de «guerra justa», y también ha instado a poner fin al conflicto entre israelíes y palestinos para prevenir una escalada a nivel mundial.
En un documento titulado «¿Guerra justa?», los obispos de Tierra Santa expresaron su preocupación por el uso incorrecto de este concepto para respaldar la violencia en Gaza, y recordaron que la no violencia es un principio fundamental en la fe cristiana, a pesar de que la doctrina católica ha adoptado la noción de «guerra justa» a lo largo de la historia.
Los obispos de la Comisión de Justicia y Paz señalaron que ni los ataques de Hamás ni la respuesta de Israel cumplen con los criterios de una «guerra justa» según la doctrina católica, y resaltaron la importancia de distinguir entre civiles y combatientes en un conflicto armado, algo que no se ha respetado en el caso de Gaza.
Además, cuestionaron la proporcionalidad en la respuesta israelí debido al elevado número de víctimas palestinas, en su mayoría mujeres y niños, en comparación con las de Israel. Destacaron que las guerras justas deben utilizar la fuerza de manera proporcional y diferenciar claramente entre objetivos militares y civiles.
Según cifras de Hamás, el conflicto en Gaza ha dejado miles de palestinos muertos, heridos y desaparecidos, mientras que Israel ha sufrido bajas en su ejército. La guerra se inició tras un ataque de Hamás a Israel, que respondió con una campaña militar en la Franja palestina.
Israel ha argumentado que busca desmantelar la capacidad ofensiva de Hamás en Gaza y liberar a los secuestrados, aunque reconocen que erradicar a Hamás es una tarea difícil. Los obispos católicos han advertido sobre la aplicación de la teoría de la «guerra justa» en conflictos modernos y han llamado a poner fin al enfrentamiento en Oriente Medio.