Blackrock ha aumentado su participación en Banco Sabadell del 3,6% al 3,9%, consolidándose como el mayor socio de la entidad catalana y manteniendo una posición destacada en BBVA. Con una posible ecuación de canje en la oferta pública de adquisición de acciones (opa) anunciada por BBVA, Blackrock podría alcanzar el 7% de BBVA si mantiene el mismo volumen de títulos en ambos.
La decisión de Blackrock y otros inversores institucionales será clave en el desenlace de la opa. Es probable que Blackrock acuda a la opa y venda sus acciones del Sabadell a BBVA, siguiendo la tendencia de inversores que suelen participar en ofertas de adquisición en las que están presentes en ambas partes.
BBVA ha mantenido su prima del 30% sobre la cotización del 29 de abril en su oferta hostil por el Sabadell, pero se especula con posibles mejoras en las condiciones económicas, como el pago de una parte en efectivo. Sin embargo, BBVA también ha contemplado la venta de su franquicia turca Garanti como una opción si es necesario aumentar su propuesta.
El Sabadell cuenta con una base accionarial atomizada, lo que complica el escenario para BBVA, ya que tradicionalmente los minoristas siguen las recomendaciones de la cúpula de la entidad. La oposición del Sabadell a la opa se ve reforzada por el rechazo del Gobierno, que considera que la operación va en contra de la competencia en el sector financiero y los intereses del país.
Dimensional también se afianza en el catalán
Otros grandes tenedores de títulos del Sabadell son Norges Bank y Vanguard, que podrían detentar importantes porcentajes de BBVA si se suman a la opa. Dimensional, por su parte, ha aumentado su participación en el Sabadell y podría quedarse con una parte significativa del capital de BBVA.
La oferta de BBVA está condicionada a alcanzar al menos el 50% de las acciones del Sabadell para garantizar el control, aunque el objetivo final es llegar al 100% y fusionar ambas entidades. En caso de que el Gobierno rechace la operación, BBVA podría mantener al Sabadell como filial y buscar alternativas para obtener los rendimientos deseados.
El rechazo del Gobierno es un factor clave para que la cúpula del Sabadell pueda mantener su independencia, ya que pone en duda la rentabilidad propuesta por BBVA con la operación hostil.