Contratar un seguro de vida y de hogar, un plan de pensiones o hacer compras con tarjeta de crédito para obtener un tipo de interés más bajo en la hipoteca puede no ser una buena idea. Helpmycash.com advierte sobre las tácticas que algunos bancos utilizan para maximizar sus ganancias a expensas de los hipotecados, lo cual puede resultar en la pérdida de miles de euros.
Es importante elegir una hipoteca basada en las necesidades individuales de cada persona, en lugar de dejarse llevar por las recomendaciones del banco. Por ejemplo, una hipoteca fija puede ser ideal para quienes buscan estabilidad en los pagos mensuales, mientras que una hipoteca mixta podría ser más conveniente para aquellos que planean cancelarla antes de tiempo.
La mayoría de los bancos ofrecen rebajas en los intereses de las hipotecas a cambio de la contratación de productos adicionales, como seguros de vida y hogar, alarmas, domiciliación de recibos, uso de tarjetas o aportaciones a planes de pensiones. Es importante recordar que ningún seguro que reduzca el interés de la hipoteca es obligatorio, aunque no contratarlo puede significar perder la bonificación.
Una práctica común es incluir el coste de los seguros en el capital de la hipoteca, lo cual puede resultar en el pago de intereses adicionales. Se recomienda pagar los seguros de forma anual o mensual para evitar estos costes extras y poder decidir cada año si renovar o no la póliza según las necesidades del momento.
Las comisiones, como las de subrogación y amortización anticipada, también deben ser tenidas en cuenta, ya que pueden representar una suma considerable si se decide cambiar las condiciones de la hipoteca o cancelarla antes de tiempo. Es importante negociar estas comisiones desde el principio para eliminarlas o reducirlas al mínimo posible.
Al recibir la oferta hipotecaria inicial, es fundamental preguntar sobre la posibilidad de que las condiciones cambien a lo largo del proceso. Se aconseja leer detenidamente la FEIN, que representa la oferta final del banco, y solicitar ofertas a varios bancos para comparar. Aprovechar la cita con el notario para comprender plenamente las cláusulas del contrato es también recomendable.