La mayoría de los 27 países apoya la hoja de ruta para la política agrícola de la nueva Comisión Europea.

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Eslovaquia y Rumanía expresan objeciones y piden eliminar desigualdades en la PAC

BRUSELAS, 24 Jun. (Distrito) –

La mayoría de los Estados miembros respaldaron las conclusiones sobre el futuro de la agricultura este lunes, un documento que reconoce los desafíos a los que se enfrenta el sector a medio y largo plazo y propone acciones concretas frente a retos como el cambio climático, las tensiones geopolíticas o la rentabilidad de la actividad, sirviendo como hoja de ruta para las políticas de la próxima Comisión Europea en este ámbito.

Las conclusiones invitan a la Comisión Europea a seguir supervisando las fuentes de complejidad de las normas comunitarias y a abordar la carga burocrática que continúa afectando a los agricultores.

El ministro belga de Agricultura, David Clarinval, en calidad de presidente del Consejo, describió el texto como «equilibrado» y que invita a la reflexión de los Estados miembros ante las demandas del sector primario.

Clarinval señaló que las conclusiones fueron respaldadas por 25 de las 27 delegaciones, con la excepción de Rumanía y Eslovaquia, que expresaron objeciones debido a sus dificultades para mantener la ‘convergencia externa’, un mecanismo de la Política Agraria Común (PAC) que ajusta progresivamente los pagos de las ayudas a la renta por hectárea en cada país para acercarlos al nivel medio de la UE.

«La representación rumana rechazó las conclusiones, mientras que la eslovaca también expresó, aunque en menor medida, su punto de vista al respecto», explicó Clarinval, añadiendo que ambos países solicitaron la eliminación de este mecanismo para garantizar una ayuda uniforme a nivel comunitario y evitar desigualdades.

Según el ministro belga, este fue el único punto que justificó el rechazo al texto, ya que 25 Estados miembros lo respaldaron, lo que llevó a su aprobación como conclusiones de la presidencia belga en lugar de un acuerdo del Consejo, disminuyendo su impacto político por falta de unanimidad. Sin embargo, Clarinval destacó que «se trata de un texto con un gran peso que ha reunido casi consenso».

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