El Ibex 35 cerró con una subida del 0,09%, alcanzando los 11.066,3 puntos. A pesar de las caídas de Iberdrola y Repsol, impulsadas por el efecto ‘ex-dividendo’, los valores bancarios tuvieron un buen desempeño en una jornada sin la referencia de Wall Street por la festividad del Día de la Independencia en Estados Unidos.
El selectivo español mostró indecisión a lo largo del día, cayendo por la mañana y poniendo en riesgo los 11.000 enteros, para luego recuperarse levemente por la tarde.
En cuanto a la agenda macroeconómica, se reveló que solo un miembro del Consejo de Gobierno del BCE se opuso a la decisión de bajar los tipos de interés en la última reunión. Además, en Europa se conoció que los nuevos pedidos del sector manufacturero de Alemania cayeron un 1,6% en mayo.
En el ámbito político, se destacó la celebración de elecciones en Reino Unido y Francia en los próximos días. Por otro lado, la Unión Europea impuso aranceles provisionales de hasta un 38% al automóvil de batería eléctrica importado desde China.
En el mercado bursátil, los descensos estuvieron liderados por Iberdrola y Repsol, mientras que CaixaBank, Bankinter, Grifols y otros registraron ganancias destacadas. En Europa, las bolsas de Fráncfort, Milán, París y Londres también experimentaron avances.
En el mercado de materias primas, el barril de Brent se incrementó un 0,23%, mientras que el rendimiento del bono español a 10 años subió, situando la prima de riesgo en 78,8 puntos. En cuanto a las divisas, el euro se apreció frente al dólar y el oro alcanzó los 2.360 dólares.
En resumen, la jornada bursátil estuvo marcada por la variabilidad en los mercados europeos, con movimientos mixtos en los diferentes sectores y activos financieros.