El Gobierno ha presentado hoy el informe de una campaña contra el racismo en la que han participado conjuntamente el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y la Liga Nacional de Fútbol Profesional. Durante la presentación estuvieron presentes el presidente de LaLiga, Javier Tebas, y la ministra de dicho ministerio, Elma Saiz, quien aprovechó la oportunidad para discutir la postura de los jugadores de la selección española de fútbol.
La ministra de Igualdad se refirió a las declaraciones del portero español Unai Simón, quien recientemente expresó su opinión sobre el llamado del francés Kylian Mbappé a los ciudadanos franceses para votar en contra de la extrema derecha. «Es un tema político. A menudo tenemos la tendencia a opinar demasiado sobre ciertos temas cuando quizás no deberíamos», comentó el guardameta del Athletic.
La ministra elogió la postura del jugador y fue enfática: «Estas cuestiones nos conciernen a toda la sociedad en su conjunto, y me refiero a todas las personas. Se trata de ser racista o no serlo. Los mensajes ambiguos no tienen cabida, siempre hay que ser contundente y dar ejemplo».
A diferencia del portero o de Daniel Carvajal, quien expresó una opinión similar, la atleta Ana Peleteiro fue más crítica. «Si existe una corriente fascista en Europa después de lo ocurrido en la Segunda Guerra Mundial, creo que los deportistas deben usar su voz para hablar sobre un tema preocupante. Mbappé tiene todo el derecho de alentar a los ciudadanos a votar», afirmó rotundamente la campeona de triple salto.
En el mismo evento, ambas entidades firmaron un convenio para utilizar MOOD (Monitor para la Observación del Odio en el Deporte). Tebas también destacó que España no es un país racista, aunque reconoció que existen conductas racistas. «Mientras haya una persona española o extranjera que se sienta mal por insultos, hay racismo que debemos combatir. Los buenos no podemos permitir que los malos triunfen y trivialicen los insultos», añadió.
