En ocasiones se discute sobre la comparación entre las carreras de los hermanos Gasol en la NBA, concluyendo que «Marc no fue Pau». A pesar de las diferencias, Marc ha tenido logros trascendentales que merecen reconocimiento. La retirada de su camiseta con el número ’33’ por los Grizzlies es un homenaje merecido que nos recuerda la importancia de su legado.
Marc, a su manera, ha sido tan grande como Pau. ¿Qué hubiera pasado si Marc hubiese sido el hermano mayor y Pau el mediano? Su trayectoria, basada en trabajo, dedicación, espíritu y una mente prodigiosa para el juego, lo convirtió en un pívot de referencia en la NBA por unos años.
Escapar a la sombra de un mito
Es digno de elogio que Marc haya construido su propio camino hacia la leyenda, escapando de la sombra de su hermano Pau, uno de los grandes del baloncesto mundial. A pesar de no ser Pau, Marc ha tenido gestas únicas en la NBA, como ser Jugador Defensivo del año en 2013 y formar parte del quinteto ideal en 2015.
Además, Marc fue fundamental en la transformación de los Grizzlies, una franquicia sin alma, en un equipo ganador con un estilo reconocible. Su legado en Memphis es extraordinario y su tercera camiseta retirada es un merecido reconocimiento a su contribución.
